Una nueva investigación de las universidades de Warwick y Lancaster (Reino Unido) y la Universidad Humboldt de Berlín (Alemania), publicada en Neuroscience & Biobehavioral Reviews, ha revelado que el azúcar aumenta el cansancio y disminuye el estado de alerta una hora después de su consumo.
Los investigadores utilizaron datos recopilados de 31 estudios publicados sobre casi 1.300 adultos para analizar el efecto del azúcar en varios aspectos del estado de ánimo, como la ira, el estado de alerta, la depresión y la fatiga.
También evaluaron de qué modo la cantidad y el tipo de azúcar consumido pueden afectar el estado de ánimo y si marcan alguna diferencia la realización de actividades físicas y mentales exigentes.
Encontraron que el consumo de azúcar no tiene prácticamente ningún efecto sobre el estado de ánimo, independientemente de la cantidad consumida. Además, las personas que consumían azúcar se sentían más cansadas y menos alerta que las que no lo hacían.
Unos de los autores del estudio, Maylor comenta que esperan que los resultados de sus investigaciones contribuyan a afianzar las políticas de salud pública para reducir el consumo de azúcar. Por su parte, el director del estudio, Mantantzis, afirma que la idea de que el azúcar puede mejorar el estado de ánimo ha estado ampliamente afianzada en la cultura popular, tanto que, personas de todo el mundo consumen bebidas azucaradas para estar más alerta o combatir la fatiga. «Nuestros hallazgos indican muy claramente que tales afirmaciones no están fundamentadas; en todo caso, el azúcar probablemente les hará sentir peor«.
Sünram-Lea, otro de los autores, concluye que el aumento en los últimos años de la obesidad, diabetes y el síndrome metabólico evidencian la necesidad de estrategias dietéticas para promover un estilo de vida saludable a lo largo de la vida. Estos resultados muestran que las bebidas azucaradas o los refrigerios no suponen una “recarga de combustible” rápida para que podamos sentirnos más alerta, sino más bien al contrario.